Por. Máximo José García González.
Dos mujeres cubanas, una activista de derechos
humanos y la otra, familiar de un reo político denuncian que son torturadas
psicológicamente por la policía política en combinación con los carceleros cada
vez que asisten a la ergástula donde está recluido arbitrariamente Ramón
Alejandro Muñoz González.
Malintencionadamente, cada vez que acuden a la
prisión capitalina: Combinado del Este para realizar la visita al reo
estipulado por las normas carcelarias, las autoridades incumplen injustificadamente
con el horario señalado previamente para el desarrollo de la misma.
El 31 de mayo el preso tenía establecida la
visita para las 9:30 a.m., pero a pesar de estar puntualmente en la cárcel,
ambas fueron informadas contradictoriamente por las autoridades que la visita estaba
asignada para el horario de la tarde, por lo que tenía que esperar.
Ambas esperaron a ser avisadas bajo un tedioso
sol hasta el mediodía, en que fueron cacheadas indignante y rigorosamente, hasta incluso todos los
productos y artículos destinados para la sobrevivencia del encarcelado.
Finalmente, después de un extenuado recorrido
y de una prolongada espera pudieron ver a Muñoz González. Lo notaron en malas condiciones,
pero en cambio, muy firme en sus convicciones opositoras al régimen.
Las victimas de esta odisea fueron: Yamile
Garro Alfonso, familiar del apresado y Belkis Felicia Jorrin Morfa:activista de
derechos humanos.
Esta información fue brindada por Jorrin Morfa.
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