Recuerdo que hace algunos años abandoné la Convergencia Liberal Cubana (CLC), cuando violando los estatutos de la organización, me impusieron una declaración con la que no estaba de acuerdo. La Convergencia Liberal emitía sus declaraciones, utilizando únicamente el consenso, jamás lo hacía por votación mayoritaria.
Yo era miembro de la llamada “Comisión para la Posición Común ”,pero el capricho de “políticos” sin muchos conocimientos de política, queria responder a unas declaraciones, del inconfesable Carlos Lage Dávila, sobre el decir; de que Cuba tenía dos Presidentes. Ellos veían en esas declaraciones disparatadas, la posibilidad de que Chávez, asumiera las atribuciones del gobierno cubano.
Les dije; “Chávez no gobernará, jamás a Cuba, es el gobierno cubano, quien gobierna a Chávez y a Venezuela”. De todas formas hicieron esa tonta declaración, que me negué a firmar y por la que me retiré de la organización, de la que ya nadie oye hablar en la actualidad y de la que yo era portavoz, aunque dicen, que aun existe.
Hoy vemos que Chávez era verdaderamente el títere del castrato y que los gobernantes cubanos son quienes controlan, como si fuera su hacienda privada, los destinos de la Venezuela de Simón Bolívar y son quienes imponen a sus gobernantes. El candidato para la futura presidencia es Nicolás Maduro, aprobado por desición de los hermanos Castro. De Hugo Chávez solo se escucha hablar, como de la cadena trasmisión, para realizar la transición.
Chávez ha perdido toda importancia política, él ha pasado a un segundo plano. En los últimos días, los gobernantes cubanos, convocaron a todos los “factores importantes” de la Venezuela chavista, para una reunión, en la Ciudad de la Habana y les dijeron; “tienen que ponerse de acuerdo y organizar la perrera”.
Maduro queria nominar como se sabe, a Blanca Eekhout, a la presidencia de la Asamblea Nacional , marginando socarronamente, a Diosdado Cabello, pero Diosdado, ni corto ni perezoso, le paro el caballo. Desde ya el gobierno cubano, les dijo; nosotros les repartiremos, el poder. De Chávez nada, fueron Raúl y los restos mortales de Fidel Castro.
Ahora la “perraya” se marchó hacia Venezuela y pospusieron la fajaleta hasta mejor ocasión. Pero el escenario todavía no queda claro. Se supone que Cabello, elegido el sábado 5 de enero, como Presidente de la Asamblea Nacional , asumiría la presidencia provisional, el día 10 de enero y deberá convocar a nuevas elecciones presidenciales. Claro, si antes del próximo jueves, no ocurre el milagro de Chávez, que por cierto, ya nadie espera.
Maduro, el títere por excelencia, de la tiranía castrista, debe ser el candidato presidencial oficialista y el fraude electoral, lo garantiza la Habana. Asi que Nicolás, será el próximo Presidente de Venezuela. Reitero, si no ocurre el milagro de la resurrección y si no se pierde alguna bala callejera o acontece algún accidente inesperado. En estos escenarios, donde actúa de fondo, el narco tráfico, nunca se sabe bien lo que puede suceder.
Verdaderamente, investir a Hugo Chávez como Presidente, de la República Bolivariana , sería como coronar a un cadáver y solo conllevaría a posponer el problema, para un poco más tarde. Escenario que convendría indiscutiblemente, a la marginada oposición venezolana, con la que no se cuentan, ni para sacar los perros a orinar.
Veremos si los gobernantes cubanos, son capaces de controlar la situación actual y el futuro de la Venezuela , ínsula cubana rica en petróleo o si por fin retornan los apagones, a las ciudades y los campos de Cuba.
Ahora los cubanos se refugian en las predicciones sincréticas, de la letra del año, que auguran grandes cambios y conmociones tremendas, aunque entre los acólitos de la Asociación Yoruba , de Monte y Prado, insinúen que todo será muy bueno para los mandamases. Eso habría que verlo.
Héctor Julio Cedeño Negrín
Periodista independiente de Cuba.
Ciudad de la Habana , lunes 7 de Enero de 2013.
Ano 55 de la tiranía castrista y de la esperanza de su caída.
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